Luego de meses de una completamente explicable ausencia, he de decir que pude finalizar una saga luego de dos, DOS, años. Can I get a hallelujah please?
Ficha técnica:
Nombre: Laila WinterAño de publicación: 2008-2011
Autora: Bárbara G. Rivero
Editorial: Toromítico
País de origen: España
Número de libros: Cuatro
Número de páginas: Un promedio de 450 por libro.
Género: Fantasía
Mi puntuación (goodreads):
Las Arenas de Solarië: 5/5 estrellas
Los Señores de los Vientos: 4/5 estrellas
La Maldición de Ïthirie: 5/5 estrellas
El Corazón de las Sombras: 5/5 estrellas
Al inicio del año (más o menos en marzo) en uno de los vídeos del canal Susurrando Historias, Carlos habló de tres sagas que recomendaba para leer más allá de las mismas que siempre se mencionan en la comunidad lectora. El punto es que mencionó Laila Winter y su descripción de la misma fue la que me llevó a leerla, siendo honesta: "es algo así como las Winx pero más darks", vamos a ver, ha llegado al fondo de mi corazón con esa simple frase.
En realidad es una saga, pero no voy a colocar la portada del primer libro porque honestamente es HORRENDA. No sé que estaban pensando en la editorial cuando decidieron publicarla así. En fin.
Durante los cuatro libros se nos cuenta la historia de Laila Winter, una chica irlandesa que estudia en un internado llamado Lomondcastle, vive sola con su padre Sean (a quien sólo ve unos cuantos meses al año) y nunca conoció a su madre, En las primeras páginas se nos muestra la vida de Laila como una adolescente algo atormentada por una característica física que la hace destacar entre las demás: su cabello es de color verde, y desadortunadamente le ha hecho pasar muchos malos ratos, como aquella vez en que Daniel Kerry, un chico muy guapo de Lomondfield (el internado de chicos que está cruzando el lago) la apodó "Laila Pelomoco" en un baile escolar. Hasta aquí parece la típica historia de adolescentes, pero cierto día Laila conoce a cierto trío muy particular de chicas: Cynder, Nimphia y Aurige. Y desde ese momento su vida cambiará para siempre.
En las Arenas de Solarië encontramos que Laila es lo que en el cine norteamericano se conoce como la típica marginada en un instituto muy sofisticado llamado Lomondcastle al que su padre, bastante ausente desde la muerte de su esposa, la envía durante la mayoría del año. Al cumplir dieciséis años (no sé qué tienen los escritores con creer que a esa edad la vida de la gente cambia para siempre, honestamente yo preferiría olvidar mi vida a las dieciséis) vuelve a su casa en un lugar del Reino Unido que ahora mismo no recuerdo y se encuentra con que su taciturno padre planea casarse con una atractiva y joven cirujana francesa llamada Monique y, como era de suponerse, Laila la odia sin razón aparente. Esa misma noche, un hombre que "aparece de la nada" la ataca en el bosque privado de su familia (joder con la pasta que debe tener Mr. Taciturno) y le arroja un montón de sal en la cara. Sí, la sal es el nuevo arroz de los matrimonios ¿no me digan que no sabían? Y para colmo de extrañezas, a la mañana siguiente su padre se presenta en su habitación y le entrega un extraño diario forrado en cuero diciéndole que su madre se lo dejó antes de "morir". Para Laila, el mejor regalo de ese año es obviamente el de un viejo amigo de la familia al que ella considera su abuelo, Sir Richard Brown, quien le regala un costoso collar de esmeraldas que compró en uno de sus viajes por el mundo *Hanna Marin, who?* Pero volviendo al diario, Laila encuentra que es, vamos, un antiquísimo cuaderno que no tiene nada escrito a excepción de un capítulo titulado Solarië donde más tarde aquella noche nuestra protagonista lee las siguientes palabras:
Deliphes mu nansala Phaera Solis,
Portie danu tarsis ast Spherie
Solarië
Y como si fuese sacado de una película de sci-fi, frente a los ojos de Laila se abre un portal interdimensional dorado que la llevará a Ïalantïlian, Faerie, el Reino de las Hadas o, como les gusta ser llamados, La Bella Gente (aún no logro imaginarme frente al Señor del Norte diciéndole "disculpe, señor de la Bella Gente, ¿podría...?" No, just can't) específicamente a la ciudad de Solandis. Allí emprenderá un sinfín de aventuras junto a Aurige, princesa de Lunarië, Cynder, princesa de Solarië y Nimphia, princesa de Airië. Pero, más allá de sus aventuras, Laila descubrirá que su vida nunca fue ordinaria.
A lo largo de la saga nos cruzamos con una cantidad de personajes tan bien construidos y desarrollados (ejem, Reina Titania) que no le tomó mucho a la autora para llegarme directo al corazón. Además de eso, hay cualquier cantidad de criaturas fantásticas que crean la atmósfera perfecta: dragones, shilayas, pixies, duendes, etc. Y las descripciones son tan perfectas que logran hacernos sentir parte de la historia sin rayar en la exgaeración de detalles por un sólo segundo.
Lo que me gustó (probablemente con spoilers):
- En todos los reinos, la máxima autoridad es una mujer: Reina Titania, Reina Zephira, Reina Hirïa, Reina Tritia, Reina Serpiente, Reina Maeve. La sensación de leer a todas estas mujeres independientes (algunas muchísimo más que otras), auténticas, arriesgas, dispuestas a dar hasta el centro de su ser por Ïalantïlian fue maravillosa.
- La relación del Príncipe Archero con Cynder.
- La relación de Aurige con Jack Crow.
- La evolución de la Reina Titania y la Reina Hirïa.
- La forma en la que Laila y el pueblo de los Ïthiries al fin encuentra la paz que tanto merecieron.
- La dinámica entre Cynder, Aurige, Nimphia y Laila. Me encantó como la autora pudo enfatizar algo tan simple pero a la vez tan difícil de entender para algunos: los amigos no tienen que apoyarte en todas las cosas. De vez en cuando, debe haber una persona que nos plante la cara y nos diga "vamos a ver, ¿es que tú eres tonto/a de nacimiento o lo adquiriste?" y eso es justo lo que estas cuatro chicas hicieron. Con Laila al inicio, luego con Aurige, luego cuando Nimphia fue desterrado y ni hablar de cuando Maeve hipnotizó a Cynder.
- Monique, la arpía (lo entenderán cuando lo lean, lol).
Para finalizar esta reseña me gustaría compartirles los links que la misma autora facilitó en el 2013 para la descarga segura y gratuita de sus libros: Descarga Laila Winter
Y pues nada, espero regresar pronto. Y que alguien esté leyendo esto porque, honestamente, se siente como hablar con una pared algunas veces. Y ya, sin más que decir;
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