jueves, 28 de diciembre de 2017

[Hablemos de] Clichés románticos que necesito ver extintos de una maldita vez.

Heeeeeey, ¿qué tal? ^_^ Yo sigo encerrada en mi cueva de Grinch viendo The Crown y comiendo pastas como si no hubiera un mañana pero, para aquellos de ustedes que celebran esta fecha, espero estén pasándola lo más de bien. 


Hoy me dirijo a quien quiera que esté leyendo con un problema muy serio: los clichés románticos, especialmente en las novelas juveniles. Como cualquier persona normal, puedo soportar cierta cantidad de clichés, uno que otro triángulo amoroso (bien escrito y desarrollado, que escasean), los embarazos que aparentemente suceden de la nada, los enamoramientos entre mejores amigos, etc. Pero llega un punto en el que es necesario decir POR FAVOR, DETÉNGANSE. Y ya es ese momento para mí. Aquí les dejo una serie de clichés con las que estoy harta de lidiar, espero no herir sensibilidades y si lo hago  ¯\_(ツ)_/¯ 

1) El "insta-love"


El Urban Dictionary define este concepto como "una situación en la que alguien a quien apenas conoces piensa que eres su alma gemela y quiere pasar el resto de sus días contigo". Si has leído al menos un libro de YA (Young Adult) o NA (New Adult) tal vez esto te suene extrañamente familiar. Piensa en un par de personajes que apenas se conocen, tal vez nunca en sus vidas se hayan visto pero, por alguna razón que nadie además de ellos comprende, saben en el momento mismo en que se ven a los ojos por primera vez que están destinados a estar juntos. 

Nuestra amiga Abbi Glines es una verdadera experta en este tema.

Si por alguna razón gloriosa nunca has leído un insta-love, aquí te explico algo de contexto: Chica conoce chico, este chico normalmente tiene ojos del color del océano, cuerpo de dios griego y sonrisa de modelo de la marca Calvin Klein (vamos, todos sabemos que así es exactamente como lucen TODOS los adolescentes), chico hace contacto visual con chica, chico y chica se enamoran perdidamente. 


Listo, ahí está. Esto es todo.No lo simplifico porque lo odio, sino porque así es tal como lo he leído en decenas de libros. ¡Hay ocasiones en las que toma un sólo párrafo! ¡Cuatro renglones! No hay nada más allá de este cliché, ya que la mayoría de libros que lo toman como premisa siguen la misma línea: los personajes tienen una "química" asesina, tienen sesiones de besuqueo/sexo súper intensas, luego a la mitad del libro hay un problema o se revela un "enorme secreto" que desencadenan un drama gigante y en las últimas veinte páginas todo se resuelve. Conclusión: Vivieron felices y comieron perdices.
Permitanme comentarles tres razones simples por las que odio este cliché:
a) Se roba mucha esencia en la trama: En mi opinión, saber quién es el interés amoroso de quién destruye gran parte de la historia. Además, muchas veces este tipo de relaciones se basan única y exclusivamente en las palabras, nada de acciones. ¿Actos? ¿Compromiso? ¿Quién necesita eso? PFFFF. 
b) Son demasiado predecibles: Seamos sinceros, nadie nunca dice "Oh, Dios mío, lo vio y se enamoró de él al instante, es completamente improbable que terminen juntos".
c) Me niego rotundamente a la idea de que el amor a primera vista sea tan ridículamente posible y común como se muestra en este tipo de historias. 

Llegados a este punto, prefiero clavarme un tenedor en medio de las cejas que leer otro insta-love

2) Te trato como un pedazo de mierda porque es la única forma que conozco para protegerte o soy un neandertal que no sabe nada sobre cómo demostrar sus sentimientos.
Este es uno de los clichés más comunes en la literatura juvenil. Son los típicos personajes masculinos descritos como musculosos, con un montón de tatuajes y una "mirada asesina" lo que sea que eso signifique.


Estos tipos usualmente tienen a) dinero, b) un pasado oscuro, c) una actitud de chulos insufribles que ni sus propias madres soportarían. Pero, por alguna razón para una gran parte de la comunidad lectora parecen ser adonis sacados del Olimpo. Un ejemplo clásico es el desbordante éxito que tuvo la saga de libros After que, por si no lo saben, tiene uno de los personajes masculinos más terribles que he podido leer [y no sólo yo], pero aún así Anna Todd logró suficiente popularidad para publicar más de cinco entregas de esa misma serie.




3) Te amo tanto que no quiero vivir en un mundo en el que tú no existas (también conocido como: codependencia)
Este ni siquiera necesita ser explicado. Una palabra: Twilight. 
Dude, I mean... 
¿Cuál es mi principal problema con este cliché? La audiencia que recibe. Supongamos que la mayoría de personas que leen este tipo de libros tienen una edad mínima de 11 o 12 años y ¿qué les estamos enseñando? Eso, que la codependencia irracional, casi tóxica es el amor en su máxima expresión. Que debes pasar todo tu tiempo libre con la persona que te gusta, abandonar a tus amigos por esa persona, alejarte de tus padres, etc, etc, etc. 

4) Terminamos pero vamos a regresar aunque los problemas que nos llevaron a romper la relación sigan presentes.
Este no lo he leído en taaaaaaaaaantos libros, sin embargo recuerdo que la autora de una de mis sagas juveniles favoritas arruinó uno de mis ships favoritos EN LA VIDA, con este cliché. Les estoy hablando de Fall Away de Penelope Douglas. Si no la han leído, no sé qué están esperando. 


¿Qué sucede con este cliché? Las parejas no evolucionan y a medida que avanzas en la lectura te sientes como si estuvieras leyendo el mismo párrafo una y otra y otra y otra vez. Pelean por las mismas cosas, siguen los mismos celos y las mismas inseguridades, cuando se supone que la gracia de crear más de un libro sobre una misma pareja de personas es mostrar cambios ¿no? ¡¿NO?!



5)."No eres como las otras chicas"


Un clásico de este cliché son los libros de Colleen Hoover. Y no me malintepreten, yo amo muchos de sus libros, pero mi problema radica es con esa frasecita. Decirle a una mujer que no es como las demás no es un piropo o un cumplido, es una forma de perpetuar la rivalidad tácita que existe entre todas las chicas.  Al decirle a una chica que no es como las demás, se le está dando a entender que debe posicionare en contra del "estereotipo femenino" para ser mejor, para ser válida. Decirle que no es como las demás no la eleva, sólo hace que las otras chicas parezcan inferiores.


6) Los triángulos amorosos.


Los triángulos amorosos se encuentran en el top 5 de clichés más utilizados por la mayoría de autores en la literatura juvenil. Para mí, son una fuente de drama innecesario que la mayor´parte de las veces coloca a la mujer en el lugar de "elegir a un compañero sentimental" porque claro, todas las mujeres necesitan a un hombre ¿no? Incluso las heroínas como Katniss Everdeen. 


Los triángulos amorosos cortan una gran parte de la atención a la trama principal, ya que la mayoría de personas sigue leyendo y leyendo las nuevas entregas (cuando se trata de sagas o trilogías) para saber cómo se resuelve el triángulo al final. 

7) Me gusta mi mejor amigo/a.


¿En serio tengo que explicar algo aquí? ¡¿EN SERIO?!

8) Somos un triángulo amoroso pero no sé a quién elegir porque uno es mortal y el otro un ser sobrenatural súper sexy.


Este es uno de los que más harta me tiene. Hablemos de las sagas de vampiros, las sagas de "cazadores" de algún ser sobrenatural, o hablemos de las sagas de "soy mortal pero he sido elegido/a para acabar con el tipo/a malo/a". ¡PORFAVORDETÉNGANSE!

9) Todos los personajes se enamoran de mí aunque haya doce mil mujeres más en esta escuela.


¿Todos hemos escuchado esta historia alguna vez, no? La chica de cabello deslumbrante, ojos hermosos y una personalidad arrolladora [que cree que es fea, por supuesto] pero de la que, sin razón alguna, se enamoran más de tres personajes en el libro. Ha de ser por su increíble personalidad. La mayoría de veces es demasiado obvio que estos personajes están basados en lo que las autoras habrían deseado ser de adolescentes. Por favor, ya basta.


10) Me gustas pero también me quiero follar a tu hermano.


Ok, este sólo lo leí una vez pero me dejó suficientemente traumatizada como para tener que incluirlo.


Vale, vale, vale, ya dejo de tirar hate. Creo que una parte dentro de mí se ha quitado un enorme peso de encima luego de escribir esta entrada. Espero les haya gustado y no se hayan sentido insultados por las estupideces que escribí aquí, sólo necesitaba decirlo porque en serio estoy harrrrrrrrrta de leer estas cosas una y otra y otra y otra vez en la literatura juvenil. 

¡Nos vemos a la próxima! <3




sábado, 23 de diciembre de 2017

[Hablemos de] Los mejores libros que leí en el 2017.

Hola, hola, hola. Esto de las vacaciones ya se me subió a la cabeza y no he hecho más que comer y comer todos estos días (además de ver series, claro). Pero hoy que volví a abrir blogger y voy a la lista de lectura me encuentro con que ya hay un montón de entradas de gente hablando sobre sus mejores y peores lecturas del año, lo que se me hizo un poco descabellado hasta que le eché una miradita al calendario y caí en cuenta de ya es 23 de diciembre. VEIN-TI-TRÉS-


Así que como toda persona que acaba de sufrir un SHOCK, me remití en mi mente a la cantidad de lecturas que hice este año. Aquí les dejo el resultado:



Bueno, primero lo primero. Este año leí un total de 64 libros. Por favor, apreciemos el mensaje motivador de Goodreads "eres buena leyendo, y probablemente también en un montón de cosas más!!" ¿Quién necesita un psicólogo cuándo tengo esta red social?


  1. El libro más corto que leí este año fue "El arte de la Guerra" Recomendadísimo. Es la hora y sigue sorprendiéndome como ese montón de cosas que se escribieron hace miles de años sigan siendo aplicables en la época actual. 
  2. El libro más largo que leí fue "Cuentos Completos" de Guy de Maupassant. a) Increíble para practicar francés y b) El hombre fue el pupilo de Gustave Flaubert, GUSTAVE FUCKING FLAUBERT, hay que leerlo al menos una vez en la vida.
  3. El libro más popular que leí este año fue, por supuesto, Harry Potter y la piedra filosofal. 
  4. El menos popular fue Poesía Completa de Edward Thomas (que me parece fatal, fatalísimo que sólo otra persona de las que sigo en Goodreads lo haya leído). 

Mi puntuación media es de 3,7 (no soy tan hater como parezco).

Olvídenlo. Le tiré hate a este libro y apenas era 2 de enero, aparte le di una sola estrella JAJAJAJAJA.

Ahora, el momento que todos [nadie] han estado esperando: Mis cinco libros favoritos de este año.

 

Memorias de un amigo imaginario - Matthew Dicks.
Este libro me pareció una joya total  y completa. Me enamoré de los dos personajes principales casi instantáneamente y a la hora de hoy no me arrepiento de nada. Me hicieron reír, llorar, preocuparme y emocionarme como muy pocos libros lo logran. La temática que maneja es muy hermosa y se desarrolla el tema del espectro del autismo de una manera perfecta; el autor es capaz de convencerte de que Max tiene una enfermedad, más no es esa enfermedad. Además de eso, me gustó mucho la elección del narrador que hizo Dicks, nadie podría haberlo hecho mejor que el viejo Budo. Me fascinó la naturalidad, lo genuino de los personajes y la sencillez de la historia. Se lo he recomendado a casi todas las personas que me preguntan "¿y ahora qué leo?" y hasta el momento nadie se ha quejado. Denle una oportunidad, se lee súper rápido. Dense la oportunidad de terminar el 2017 con una historia entrañable que posiblemente no olvidarán.
Laila Winter: La Maldición de Ithirie - Bárbara G. Rivero.


Aquí en el blog ya les he hablado antes de esta saga, sin embargo para este top sólo elegiré el tercero. ¿Por qué el tercero? Es un poco díficil de explicar si no la han leído porque una gran parte sería un spoiler, así que sólo diré las tres cosas que más me gustaron: a) el desarrollo de los personajes, b) el humor de Aurige (igual que en los demás libros, sólo que en este fue exxxxxxxxxxxxxxxxtra sassy) y c) me encantó cómo al fin empiezan a unirse todas las piezas del montón de basura que cuenta Laila en los libros anteriores y por fin, POR FIN, las reinas dejan de hablar en un lenguaje encriptado. Si no la han leído, denle la oportunidad. Bárbara tiene una mano increíble para escribir fantasía, no se arrepentirán.

Paula - Isabel Allende.


En este libro, Isabel Allende nos cuenta la historia de su vida (incluyendo la historia de su familia al mismo tiempo), sin embargo, esto no es algo que le surja espontáneamente. Por el contrario, es bajo una calamidad doméstica que la autora decide ponerse con pluma y papel a escribir. La historia va dirigida a su hija, Paula, con el objetivo de que cuando "despierte" del coma no se sienta tan perdida. 

Toca temas que van desde los matrimonios arreglados, la abuela de Allende (que inspiró La Casa de los Espíritus), el golpe de estado en Chile hasta divorcios y la utopía de encontrar el amor verdadero. No voy a mentir, el libro es desgarrador, crudo y pondría hasta la persona más dura e insensible a llorar como un niño al que le arrebatan su dulce de las manos. Si están interesados en leer no-ficción en este próximo año, Paula es una maravillosa opción de la que no hay forma de arrepentirse.

Les juro que cada vez que pienso en este libro termino más o menos así:




Always and Forever, Lara Jean - Jenny Han.

No incluir este libro en mis favoritos de este año sería mentirme a mí misma, incluso tiene reseña aquí en el blog y ya confirmaron su adaptación cinematográfica para-la-que-no-puedo-esperar-más. Amé esta trilogía de principio a fin, incluso el triángulo amoroso a pesar de que los odie en todos los demás libros. Amé a Peter, a Lara, a Kitty e incluso a Margot de vez en cuando. Los personajes son entrañablesy te hacen encariñarte aunque los temas que traten los libros sean muy sencillos: relaciones de secundaria, qué universidad escoger, etc. Always and Forever, LJ no fue la excepción. Me sentí muy identificada con muchas de las situaciones que pasan a lo largo de este libro, además la historia del papá de Lara me llegó tan, tan profundo al alma que creo que se convirtió en una de mis cosas favoritas sobre esta trilogía. Por supuesto, hubo muchas cosas que no me gustaron pero creo que fue un cierre adecuado [luego de pensarlo un tiempo, claro. Al principio sólo quería 12,000 libros más sobre Lara Jean] y es una historia que definitivamente reelería en algún futuro. 
Un plus: Los fan-art de esta trilogía son MAGIA PU-RA.
El túnel - Ernesto Sabato.



Tuve que leerlo para mi clase de Psicología Clínica este semestre y, aunque ya lo había leído hace unos cuatro años, pude comprobar esa frase de "a veces no es el momento adecuado para un determino libro en tu vida" ¿saben por qué? Porque hace cuatro años yo no estaba preparada para asimilar la magnitud de la maravilla que es este libro de Ernesto Sabato [aunque mi favorito sigue siendo El Escritor y sus Fantasmas]. Pude ver la historia desde la óptica psicológica y el personaje de Juan Pablo y eso me consumió, no pude soltar el libro en las cuatro horas que me tomó leerlo. Recomendadísimo, sobretodo si quieres empezar con autores latinoamericanos.




Y pues nada, eso ha sido todo.

Quería hacer un top de los cinco libros que menos me gustaron pero meeeeeeeeeeeeeeeeeeeeh, me parece un gasto de energía innecesario el ponerme aquí a tirarle odio a un par de libros. Es tiempo valioso que podría emplear en comer... o ver series. 


¡Nos vemos a la próxima!
Y en caso de que no vuelva a escribir antes, feliz navidad.

miércoles, 20 de diciembre de 2017

[5] "El arte de perder" de Elizabeth Bishop.



El arte de perder
El arte de perder no cuesta tanto
irlo aprendiendo (insisten las cosas
hasta tal punto en perderse, que el llanto

por ellas dura poco). Y el espanto
por perder algo cada día, rosas
que se deshojan, horas, llaves, cuanto

pueda ocurrírsele a uno, no es tanto.
Practica entonces perder más, y goza
el ritmo de la pérdida, su encanto:

pierde ciudades, nombres, y en Lepanto
pierde una mano, un destino, una moza:
nada de esto será para tanto.


Perdí el reloj de mi madre, y el manto
con que cubría mis hombros, la loza
en que tomaba el té, pero igual canto.

Perdí mi tierra, mi rumbo y aguanto
de lo más bien tanta pérdida. Es cosa
de acostumbrarse: no, no es para tanto.

Perderte a ti, por ejemplo, tu encanto
y tu cariño perder, dolorosa
prueba sería, pero nunca tanto
(aunque parezca condena espantosa).

* * *

Un arte

El arte de perder no es difícil adquirirlo.
Tantas cosas parecen empeñadas
en perderse, que su pérdida no es un desastre.

Pierde algo cada día. Acepta el tumulto
de llaves de puertas perdidas, la hora malgastada.
El arte de perder no es difícil adquirirlo.

Practica entonces perder más aún, y más rápido:
lugares, nombres, y el sitio al que se suponía
que viajarías. Nada de esto será un desastre.

Perdí el reloj de mi madre, y -¡mira!- la última, o
penúltima de tres casas que amaba se fue.
El arte de perder no es difícil adquirirlo.

Perdí dos ciudades, ambas adorables. Y, más ampliamente,
algunos sitios de los que era dueña, dos ríos, un continente.
Los echo de menos, pero no fue un desastre.

-Hasta al perderte a ti (la voz bromista, un gesto
de amor) no habré mentido. Es evidente que
el arte de perder no es demasiado difícil de adquirir
aunque parezca por momentos (¡Escríbelo!) un desastre.

* * *

Este arte de perder

No, no es difícil adquirir el arte de perder:
hay tantas cosas empeñadas en
perderse, que su pérdida no importa.
Pierde algo cada día, acepta el río
de llaves que se pierden, horas malgastadas.
No, no es difícil adquirir el arte de perder.
Practica entonces perder más, más rápido:
nombres, lugares, ¿para adónde ibas?
Ninguna de estas cosas es desastre.
Perdí el reloj de mi madre, y -fíjate- la última
o la penúltima casa querida que tuve.
No, no es difícil adquirir el arte de perder.
Perdí mis dos adoradas ciudades, e incluso
algunos sitios de los que era dueña, dos ríos, un continente.
Los echo de menos, pero no es un desastre.
-Incluso si te pierdo a ti (tu voz bromista, esos gestos
que adoro) no habré mentido. Es obvio
que el arte de perder no cuesta ni tanto adquirirlo
aunque por momentos parezca que (¡escríbelo!) sí es un desastre.

domingo, 17 de diciembre de 2017

[Música] Canciones que me suenan a infancia.

Con motivo de mi cumpleaños número diecinueve (jueves, catorce de diciembre), he estado experimentando algo así como una oleada de un no-sé-qué que parece no detenerse con nada. He de confesar que he pasado la última semana reviviendo cosas que hacía cuando era más pequeña, y una de esas ha sido escuchar la música que me apasionaba en esa época. Eso es lo que vengo a compartirles hoy: Nostalgia. 

 Everyday (High School Musical)


Vamos a ver, cuando salió esta película (17 de agosto de 2007) yo tenía ocho años. O-C-H-O. Parece irreal la cantidad de veces que me planté frente al televisor de mi casa, porque en esos tiempos sólo teníamos un televisor en la sala de estar, y me apoderaba del control remoto desde las siete de la noche hasta las nueve que se terminaba. Y no me la perdía ni una sola vez: la versión sing-along, la versión subtitulada en inglés y la versión en español. Para la yo de hace 11 años era literalmente imposible no amar esta película. ¿Y a quién engaño? Para la yo de 19 mucho menos. 

Gotta Find You (Camp Rock)


Yo ya llevaba dos años obsesionada con los Jonas Brothers cuando se estrenó Camp Rock (20 de junio de 2008). Estaba en primero de la secundaria y todos mis cuadernos tenían la cara de Joe, Nick o Kevin, o la de todos tres juntos. Ahora, imagínense mi reacción cuando un día viendo Disney Channel (que era más o menos parte de mi rutina diaria) me encuentro con que van a estrenar una película donde Joe es el protagonista. Sí, tal como suena, yo estaba en la motherfucking luna. Y, a pesar de que me gustaban todas las canciones, ésta siempre ha llevado un lugar especial en mi corazón... tanto como para aún tenerla guardada en la biblioteca de mi celular. But you know, once a JoBros fan, always a JoBros fan  ¯\_(ツ)_/¯

The Climb (Hannah Montana: The Movie)


Hannah Montana fue lo más top para mi infancia después de los Jonas Brothers (así que vayan haciéndose una idea de mi expresión mientras miraba ese episodio en el que ellos aparecen en un capítulo de la serie: mindblowing). Fue la serie que me ayudó a aprender inglés de la forma más involuntaria posible ya que practiqué desde el 2006 hasta el 2011 sin siquiera intentarlo, sólo escuchaba canción tras canción sin aburrirme y de repente ya sabía pronunciar, escribir y comprender. Esta película me parecía una obra de arte en su tiempo, obviamente ahora veo que la trama era más bien simplona pero IGUAL, me encanta. Además aquí fue donde conocí a uno de mis crushes eternos: Lucas Till. En conclusión; Hannah Montana >>>>>> el mundo.

A Night To Remember (High School Musical 3: Senior Year)



Esta ni siquiera necesita explicarse. High School Musical 3 es magia pura: las coreografías, las canciones, EL CABELLO DE SHARPAY. Me declaré fan eterna a los 10 años.

Magic (Wizards of Waverly Place: The Movie)


¿Una película de los Hechiceros de Waverly Place en el Caribe? ¿Justin en traje de baño? Sign me in. Amé esta película  y cada vez que escucho esta canción me teletransporto a esa época. Aparte el plot twist es increíble, me da la vida entera. 

One and the Same (Programa de Protección para Princesas)


Aquí fue cuando me enamoré perdidamente de Demi. Ya la había visto en Camp Rock, pero cuando vi PPP quedé fascinada. Su voz es una maravilla y todos los mortales deberíamos apreciarla. 


Me, Myself & I (Sonny with a Chance)


Esta serie es todo lo que está bien en la vida. Dos palabras: CHA NNY.

Somebody (Lemonade Mouth)


Reservé toda mi energía para escribir maravillas sobre esta película. ¿Qué es lo mejor de Lemonade Mouth? Tal vez sea la música, tal vez los actores o tal vez sea TODO. Esta cinta de Disney es una joya adelantada a su tiempo. Los personajes son hermosos, todos tan diferentes entre sí pero al mismo tiempo tan idénticos, además el concepto de la banda >>>>> Vida entera. No están interesados en la popularidad, que es lo que usualmente pasa con este tipo de películas adolescentes, sino que quieren ser oídos. La amo, la amo, la amo. 

Bueno, después de desahogarme aquí creo que ya puedo ser un poquito más feliz con esto de envejecer. Espero alguno de ustedes se sienta igual que yo cuando escucha estas canciones, por más ridículo que suene. El sonido de la infancia siempre vive en mí, no me arrepiento de nada. 


¡Nos vemos a la próxima! <3

PD: Así quedé después de esta entrada:





martes, 12 de diciembre de 2017

[Serie] Hablemos de: My Mad Fat Diary y por qué todos deberían verla

En el universo de las series adolescentes normalmente estamos acostumbrados a ver una misma temática repetirse con distintos actores en distintos canales, sin embargo, cada tanto los dioses del Olimpo permiten que manos bondadosas produzcan maravillas de la talla de My Mad Fat Diary. 


Ficha técnica 
Nombre: My Mad Fat Diary
Año de estreno: 2013
Temporadas: 3
Estado: Finalizada
Cadena de emisión: Channel 4 (C4)
País de origen: Reino Unido 
Sinopsis: 
Situada en Lincolnshire en 1996, My Diary Fat Mad sigue la historia de Rae de 16 años de edad, que acaba de salir de un hospital psiquiátrico, donde ha pasado cuatro meses. Se reencuentra con su mejor amiga, Chloe, que no es consciente de la salud mental de Rae y sus problemas con la imagen corporal, creyendo que estaba en París durante los últimos cuatro meses. Rae intenta mantener esta información en secreto y al mismo tiempo trata de impresionar a los amigos de Chloe Izzy, Archie, Chop y Finn.

La serie está inspirada en una bilogía homónima publicada por Rae Earl, una autora inglesa, que narra las peripecias de su vida a los dieciséis años luego de haber estado internada en un pabellón psiquiátrico unas semanas. Al salir de ahí, el reencuentro con Chloe, su mejor amiga de la infancia, dará un giro a su vida que incluirá nuevos amigos, nuevos amores y, sobretodo, nuevas formas de ver el mundo. 
Aquí les dejo cuatro razones para engancharse enseguida a esta serie. 

#1: Rae Earl es tú, es yo, es todos. 
Rae está en plena adolescencia y, si has estado en su lugar, debes saber lo confuso que es todo en esa época. Pelea constantemente con su madre, va a la escuela secundaria, tiene baja autoestima y serios problemas con su imagen corporal. ¿Todos hemos estado ahí al menos en algún momento, no? Sin embargo, los temas tocados por la serie no son tratados con la extrema delicadeza, casi irreal, que vemos en otras series, pero tampoco son romantizados. ¿Rae está deprimida? Sí. ¿Rae es suicida? Sí. ¿Rae cree que el mundo estaría mejor sin ella? Sí. Pero esto no hace que Rae sea personificada como alguna especie de víctima o como un personaje incapaz, al contrario, es uno de los personajes más realistas que he visto en alguna serie. Rae es capaz de hacer amigos nuevamente, de enamorarse y de intentar llevar una vida normal junto a las recaídas que implica su enfermedad, que es algo completamente normal y así es como los creadores de la serie lo quisieron mostrar. 


#2: La música: "Music speaks to you in a way nothing else can" - Rae. 
La serie se desarrolla a partir del año 1996 en Inglaterra y, como toda serie ambientada en los noventas, tiene un soundtrack maravilloso, perfectamente creado, que debería ser apreciado por todos nosotros los mortales. Lo mejor de todo es que no es algo que venga de la serie, sino que la autora misma va arrojando la gran parte de referencias musicales a lo largo de las páginas. Todo esto crea la perfecta atmósfera de nostalgia alrededor de esta década con canciones de Oasis, The Bee Gees, Radiohead, The Lemonheads, The Smiths y muchos otros. ¿Acaso necesitas otra razón? ¡Vaaaaamaaaaaaaaaas! 
#3: El sentido del humor.
No sólo viniendo de Rae sino de todos los demás personajes, incluyendo a su madre. Hasta los temas más sensibles llegan a ser tratados con un gran sentido del humor y es una de las cosas que Rae aprende de su nuevo grupo de amigos: a no tomarse tan en serio a ella misma. Son sarcásticos, irónicos y satíricos frente a la realidad, especialmente las situaciones cotidianas que viven en la escuela. 

#4: Cero estigmatización.
De todas las series que he visto, he de decir que MMFD es una de las pocas capaces de ser salvajemente directa frente a temas que deberían ser tratados así en la real. Sí, soy gorda. Sí, me hacen bullying, Sí, soy homosexual. Sí, sí, sí. Desde el inicio sabemos que Rae está enferma, que padece de un trastorno conocido como big eating disorder (algo así como la bulimia, caracterizado por grandes atracones de comida que no necesariamente están seguidos de la purga). La serie es capaz de mostrar las crisis de ansiedad e incluso la autolesión, así como diálogos sobre las mismas sin necesidad de crear un gran drama alrededor de ello, sin convertir a Rae en una marginada social, fracasada, etc., que es lo usualmente se hace con los personajes que padecen este tipo de condiciones.


Además de todo esto, la serie tiene una trama increíble, personajes maravillosos con los que es imposible no empatizar y encariñarse (al igual que con el reparto), Rae es increíblemente divertida, tiene una particular forma de ver el mundo y, al estar contada en forma de diario, la serie viene acompañada de ciertas animaciones que la hacen un 800% mejor. Vale la pena sentarse un rato y verla, es algo de lo que difícilmente uno se puede arrepentir. 

Háganlo por Finn y su carita, pls. 

lunes, 11 de diciembre de 2017

[4] Fragmento de "El Otro" - Edward Thomas

Caminé rápido, con la esperanza
de alcanzar a aquel otro. No pensaba
en qué haría entonces. Pretendía 
catar la semejanza y, si era cierta, 
conocerme a mí mismo al contemplarlo. 


Escrito en diciembre del año 1914, este poema refleja el yo ideal que todos los hombres tienen más o menos claro en su mente, en el mundo psíquico, al cual el yo real apenas llega a rozar. En este caso, Thomas se parodia a sí mismo al contar que todos los que conocían a su doble lo preferían más que a él. Moralmente más correcto, debería ser el modelo a partir del cual todos juzguemos nuestros actos.
- Nota del biógrafo.

domingo, 10 de diciembre de 2017

[Reseña] Cartas de Amor a los Muertos - Ava Dellaira.

Después de un siglo entero sin reseñas, hoy al fin me doy el gusto de sentarme a escribir sobre este libro que leí por primera vez en julio del año pasado y sobre el que aún tengo sentimientos encontrados.


Ficha técnica:
Nombre original: Love Letters to the Dead.
Año de publicación: 2014.
Autora: Ava Dellaira.
Editorial: V&R.
Género: Juvenil.
País de origen: Estados Unidos.

Sinopsis

Todo comienza con un trabajo de Lengua: escribirle una carta a alguien que haya muerto. Laurel escoge a Kurt Cobain porque su hermana lo adoraba. Y porque él murió joven, como ella. En poco tiempo tiene un cuaderno lleno de cartas a Judy Garland, Amy Winehouse, Heath Ledger y muchos otros. Sin embargo, no se las entrega a su profesora. Les escribe sobre el comienzo del instituto, sus nuevas amistades, su primer amor y sobre cómo está aprendiendo a vivir ahora que su familia se ha roto.

Y sobre lo que ocurrió cuando su hermana aún estaba viva.

Mi opinión


El libro está narrado de manera epistolar, es decir, en forma de cartas. Estas cartas nacen de un trabajo que a Laurel le asignan en su clase de Literatura el primer día de clases en su nueva escuela. La primera carta está dirigida a Kurt Cobain, vocalista de la banda Nirvana, pero a medida que avanza la historia le escribe a otros personajes famosos entre los que se encuentran Amy Winehouse, Elizabeth Bishop, John Keats y Jim Morrison. La esencia de las cartas es principalmente el devenir de la vida que Laurel lleva desde que su hermana May muriese el año pasado. En ellas, habla sobre lo mucho que la extraña, lo especial que era y lo mucho que desearía poder ser igual a ella, siente que así estaría honrando su memoria. Pero la historia no se centra sólo en Laurel sino que también nos cuenta la vida de sus amigas Natalie y Hannah, que tienen un secreto casi inconfesable, nos habla de Tristan y Kristen, un par de chicos enamorados que Natalie conoce en su clase de arte, de Sky, su primer amor y, por último, de los restos que quedaron de su familia: su padre, su madre y su tía Amy.

Al decir más arriba que tenía sentimientos encontrados me refería a una relación de tipo amor-odio, una sensación que me acompañó a lo largo de las trescientas treinta y siete páginas. Mi principal problema con este libro es el personaje principal: Laurel. Así que hablaremos primero de ella. A pesar de haber cumplido ya los quince años, Laurel parece tener la edad mental de una niña menor de diez. Es egoísta y egocéntrica a ratos y luego se culpa de todo lo malo que sucede en el universo, aunque no esté relacionado con ella. Al principio del libro me parecía que sería un personaje con potencial para crecer, sin embargo (y al igual que sucede en muchos libros juveniles) esto pasa a segundo plano cuando aparece el interés amoroso: Sky. Ella literalmente ve a Sky de lejos y ya sabe que está enamorada de él, que deben ser almas gemelas y otro montón de cosas que me dejaron así: 


Pero no me malinterpreten, yo no tengo nada en contra de Sky, sólo me parece un chico normal y corriente a quien Laurel idealiza incluso antes de saber su nombre. En mi experiencia, eso no es para nada sano (o cuerdo). Además de esto, Laurel pasa las primeras cien páginas creando un enorme misterio acerca de lo que pasó la noche en la que su hermana muere (¿o se suicida?), tanto que puede llegar a ser un poco cansón que dé vueltas y vueltas alrededor del tema que sólo menciona por completo en la página 250, más o menos. Para Laurel, May era lo mejor del mundo, sin embargo las personas a su alrededor evidentemente piensan lo contrario: su maestra de Literatura, su tía Amy, Tristan, Kristen e incluso Sky. Parece que nuestro personaje principal tiene problemas con la idealización.


Bueno, ya pasó la parte en la que me quejo, ahora procede lo que me gustó. La relación de Hannah y Natalie es sin lugar a dudas lo que me gustó, así como la relación de Tristan y Kristen. La forma en la que Sky expresa sus sentimientos sobre su madre, su padre y lo que quisiera ser cuando creciera también me resultó bastante conmovedora. La forma en la que Laurel empieza a retejer su relación con su padre (a quién su madre había abandonado mucho antes de lo de May) y como empieza a ver desde una nueva perspectiva a su tía Amy, con quien vive semana de por medio desde que su madre se mudó a California. 

El libro no es malo pero es que tampoco es exactamente bueno, es más bien una de esas historias que lees fácil y rápido y de vez en cuando sientes la necesidad de releer algunos pasajes porque (y eso se lo concedo a la autora) tiene una que otra frase que te hace poner el libro a un lado, mirar el techo y contemplar toda tu puta existencia. Sin embargo, me pareció que había situaciones en las que Laurel se esforzaba demasiado por parecer interesante y quería sacar metáforas hasta del polvo que había en el aire, lo que resultaba tedioso. Una de las cosas que más se le ha criticado a este libro es su indiscutible parecido con la novela de Stephen Chbosky, Las Ventajas de ser Invisible, sin embargo me parece a mí que la historia de Charlie está mucho mejor construida y los personajes tienen un poco más de trasfondo que los de Cartas de amor a los muertos. 



Me parece a mí que este libro se lo recomendaría a esas personas que quieren una lectura fácil y rápida, nada denso o complicado. Sin embargo, esta es sólo mi opinión y depende de cada uno de ustedes juzgar al libro. Personalmente le doy tres estrellas. Es entrenido, simple y funciona como una distracción llevadera.